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El hazing es una realidad poco mencionada, pero es uno de los pilares de nuestra sociedad que modela y construye masculinidades obligatorias destruyendo la integridad y la autoestima de cientos de jóvenes para quebrar su autoestima. Los golpes, la humillación y el estigma de la homosexualidad son los principales dispositivos de poder que usa el patriarcado para desde el COLEGIO a través de la socialización modelar un sujeto machista y patriarcal.
Es un sistema que intenta quebrantar la subjetividad del sujeto masculino para convertirlo en un potencial agresor por eso es más común en las guerras. El problema es que esta forma de socializar pasa a ser parte del imaginario peruano, ¡ya quisiéramos que esta violencia relacional solo sirviera para ser héroes de la patria! Pasa a ser un ethos, una forma de vivir, un disciplinamiento para control a los sujetxs. Quien esté fuera de la norma es castigado brutalmente
El gran miedo de muchos hombres es ser tildados de homosexuales, débiles, nerds, poco éxitosos con las mujeres. Existe en nuestra cultura un profundo desprecio por la debilidad. Somos negacionistas, no por algo se calcula que en el Perú una persona se suicida cada 22 minutos, debido a que preferimos utilizar la violencia, la burla hiriente y la modelación de una masculinidad hegemónica antes que el respeto por la diversidad, la tolerancia, la alteridad.
Hay que empezar nosotres les feministes a prestarle importancia a esta realidad, porque esta modelación de los sujetxs masculinxs influye directamente en los estigmas contra la población LGTBIQ+ y también contra nosotres les mujeres.
Se modela a través del bodyshaming, a través de la ansiedad de no ser lo suficientemente masculino; es decir, dominante, rudo, viril las subjetividades ajenas. Todo esto es ideología solo que lo hemos naturalizado.
Rechacemoslo, veamoslo como anormal, la pandilla, el colegio, la hermandad, los cofrades, la disciplina militar todos están de acuerdo con ciertos valores que los unen, ellos tienen sus propios códigos, sus maneras de relacionarse, aberrantes dicho sea de paso.
¿Estamos hartas del patriarcado? ¡Deconstruyamos el género! ¡Relaciones más horizontales YA!
#Nosoyunamujertrofeo
#DigamosNOalhazing
#NomásestigmascontralapoblaciónLGTBI
#Rechazosimbólico
Es un sistema que intenta quebrantar la subjetividad del sujeto masculino para convertirlo en un potencial agresor por eso es más común en las guerras. El problema es que esta forma de socializar pasa a ser parte del imaginario peruano, ¡ya quisiéramos que esta violencia relacional solo sirviera para ser héroes de la patria! Pasa a ser un ethos, una forma de vivir, un disciplinamiento para control a los sujetxs. Quien esté fuera de la norma es castigado brutalmente
El gran miedo de muchos hombres es ser tildados de homosexuales, débiles, nerds, poco éxitosos con las mujeres. Existe en nuestra cultura un profundo desprecio por la debilidad. Somos negacionistas, no por algo se calcula que en el Perú una persona se suicida cada 22 minutos, debido a que preferimos utilizar la violencia, la burla hiriente y la modelación de una masculinidad hegemónica antes que el respeto por la diversidad, la tolerancia, la alteridad.
Hay que empezar nosotres les feministes a prestarle importancia a esta realidad, porque esta modelación de los sujetxs masculinxs influye directamente en los estigmas contra la población LGTBIQ+ y también contra nosotres les mujeres.
Se modela a través del bodyshaming, a través de la ansiedad de no ser lo suficientemente masculino; es decir, dominante, rudo, viril las subjetividades ajenas. Todo esto es ideología solo que lo hemos naturalizado.
Rechacemoslo, veamoslo como anormal, la pandilla, el colegio, la hermandad, los cofrades, la disciplina militar todos están de acuerdo con ciertos valores que los unen, ellos tienen sus propios códigos, sus maneras de relacionarse, aberrantes dicho sea de paso.
¿Estamos hartas del patriarcado? ¡Deconstruyamos el género! ¡Relaciones más horizontales YA!
#Nosoyunamujertrofeo
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#NomásestigmascontralapoblaciónLGTBI
#Rechazosimbólico