Este baneado es de los míos. Luego del trauma que me produjo la caída de Rapishare y Megaupload y todos los servidores online, me convertí en el bibliotecario mendigo del porno. Logré acumular cerca de 4 teras de material de todo tipo, desde los amateurs hasta los de estreno de las casas pornográficas más conocidas.
Aún tengo el disco, por si algún día internet cae. Será fiel testimonio del arte sutil y poco comprendido del entretenimiento para adultos.